IGLESIA FORTIFICADA DE PREJMER (Rumania).
Hace unos meses visité Rumania. Andreea, una extraordinaria guía, consiguió que me enamorara del país. Hoy quiero mostraros un lugar que me fascinó: la iglesia fortificada de Prejmer. Que sea patrimonio de la Humanidad desde 1999 es casi anecdótico.
Se encuentra en la región de Transilvania, a unos 20 kilómetros de Brasov. En el siglo XIII estaríamos en una zona fronteriza y muy conflictiva. Andrés II Quiso reforzar esta frontera y permitió la llegada de los caballeros teutónicos bajo ciertas condiciones (al no cumplirlas, serían expulsados en 1225). Serían estos caballeros quienes empezarían a construir Prejmer al comienzo del citado siglo (1212-1213). En esta región hay siete iglesias/enclaves fortificados, seis de ellos sajones y uno sículo (Prejmer, Biertan, Câlnic, Viscri, Dârjiu, Saschiz y Valea Viilor). Prejmer sería el asentamiento sajón más oriental. Esta situación fronteriza ocasionó que la población fuese atacada más de cincuenta ocasiones durante la Edad Media, pero la iglesia solo cayó una vez en manos enemigas.
En la imagen 2 muestro como sería la fortaleza originalmente. Podemos ver, en rojo, dos torreones y una segunda muralla exterior que actualmente no tenemos. La construcción consta de una iglesia con forma de cruz con un campanario en su cruce. Debido a las incursiones invasoras se fortificó la iglesia, se la rodeo de altos (unos 12 metros) y gruesos muros (hasta 5 metros), cinco torres y un foso con agua. En el lado interior de los muros, en cuatro niveles, hay habitáculos y espacio para almacenamiento víveres y provisiones. De ellos nos ocuparemos más tarde.
La entrada a la fortaleza de realiza por un túnel de unos 30 metros protegido por rastrillos de madera reforzados con metal y poderosas puertas de roble (imágenes 3, 4 y 5).
Una vez atravesado este pasadizo llegaremos a un espacio más amplio dotado de una fuerte barbacana (imágenes 6, 7, 8 y 9)
Tanto si accedemos por el lado izquierdo como por el derecho encontraremos la galería de cuatro alturas que circunda toda la iglesia.
Podemos pasar al interior y deambular, subir y bajar, por casi todo el recinto. Es impresionante. El conjunto intercomunicado cuenta con 212 habitaciones destinadas a cobijar a unas 1600 personas en caso de ataque. Cada una de estos habitáculos sería para una familia, correspondiendo el tamaño y situación al nivel económico y social de la misma.
El lugar contaba contaba almacenes para provisiones, las torres, además de su función defensora, servían de graneros y almacenes de carne ahumada. Tenía su propio pozo de agua y hasta un túnel que, partiendo de la iglesia, comunicaba con el exterior en caso de necesidad.
Actualmente alguno de estos espacios se han ambientado como un museo etnológico mostrándonos enseres y elementos de pasadas épocas. Vemos, por ejemplo, el aula de una pequeña escuela (imagen 17) que me gustó especialmente.
También podemos ver una fragua (imagen 18) o la estancia de una acomodada familia (imagen 9).
Sólo nos resta visitar la iglesia. Fue comenzada por los caballeros teutónicos en 1218 con planta de cruz griega. Tras su expulsión en 1225 fueron los cistercienses quienes se ocuparon de terminarla en 1240. En el siglo XV se añadió el campanario y entre 1512 y 1515 se agregaron dos naves laterales y la nave principal se amplió dándole el aspecto y planta que tiene hoy por hoy (imagen 21)
El interior es simple y no tiene rastros de frescos en sus paredes. Quizá lo más interesante de su decoración es un retablo tríptico de mitad del siglo XV cuya temática es la Pasión de Cristo.
Os recomiendo dar una vuelta alrededor de la fortaleza. Ello os permitirá observar las defensas exteriores o los restos de las torres hoy desaparecidas.
Prejmer, un fantástico lugar cargado de historia en un impresionante país. Un país al que seguramente volveremos y que seguiré mostrando en nuevas entradas en este blog.
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