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Mostrando entradas de junio, 2021

MONASTERIO DE LA RESURRECCIÓN (Zaragoza).

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 MONASTERIO DE LA RESURRECCIÓN (Zaragoza). En este ocasión no saldremos de Zaragoza. Nuestro destino es un gran desconocido hasta para los propios zaragozanos, se trata del Monasterio de la Resurrección de las Canonesas regulares del Santo Sepulcro. La Orden del Santo Sepulcro fue fundada en Jerusalén en 1098, de canónigos regulares. El primer monasterio femenino fue fundado en 1227 siguiendo la regla de San Agustín.  El monasterio del Santo Sepulcro de Zaragoza es muy especial, es el único de esta orden en España y el único monasterio que se conserva íntegro y completo en estilo mudéjar en Aragón. Fue fundado en 1304 por la Marquesa Gil de Rada que descendía de una destacada familia de la corte de Jaime I. Entre sus promotores y mecenas se encuentran también fray Martín de Alpartir (canónigo del Santo Sepulcro de Calatayud) y el arzobispo de Zaragoza Lope Fernández de Luna.  En convento zaragozano tuvo un carácter noble e incluso hubo un momento en el que se las trataba de Dueñas. El
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  ERMITA SAN SATURIO (Soria). Soria es tierra de románico, de ordenes militares y, también, de misterio y leyenda. Hoy visitamos la ermita de San Saturio que se encuentra al oeste de la ciudad de Soria, en la margen izquierda del Duero, en la ladera de la Sierra de Santa Ana. Podemos llegar a ella por dos caminos. La primera opción es dejar nuestro coche en un pequeño aparcamiento situado al pie de la N-231. Nos encontramos en territorio templario, en lo que fuera el monasterio de San Polo. Hay quienes afirman, y estoy de acuerdo, es que de esta manera controlaban el acceso a la ermita de San Saturio. (Si queréis saber algo más sobre el monasterio de San Polo os invito a consultar su entrada en este mismo blog:    https://www.viajarverencontrar.com/2020/05/monasterio-san-polo-soria.html  ).  Bien, atravesamos lo poco que queda del monasterio, que hoy es una propiedad particular, y caminamos poco más de un kilometro. A  la orilla del Duero, un paseo que inspiró a Bécquer, a Geraldo Dieg